La mentalidad y el pensamiento de Thoreau resulta hoy alucinante, pues choca frontalmente con las ideas que estructuran nuestra sociedad. Difundir sus ideas masivamente podría ser peligrosísimo, e incluso algún político podría ver cómo sus órganos comienzan a hervir al entrar en contacto con el libro. Analizar sus ideas en un contexto que dista dos siglos de la actualidad asombra, y me pregunto cuánto duraría sin desvanecerse este señor si echara un breve vistazo a nuestro mundo.
Compartiré con ustedes algunos fragmentos de Walden que me parecen magníficos:
- "La mayoría de los lujos y muchas de las llamadas comodidades de la vida no sólo no son indispensables, sino obstáculo cierto para la elevación de la humanidad"
- "En cualquier circunstancia, de noche o de día, siempre he tenido ansias de mejorar el momento y de hacerlo plenamente mío; de detenerme en la encrucijada de dos eternidades, el pasado y el futuro, que es precisamente el presente, y vivirlo al máximo"
- “…en vez de discurrir cómo venderlo, me preocupé más bien de cómo evitar la necesidad de tenerlo que vender. La vida que los hombres elogian y consideran lograda no es sino una de las posibles. ¿Por qué exagerar su importancia en detrimento de otras?”
- “Al final, no sabemos ya lo que significa vivir al aire libre, y nuestras vidas se han vuelto domésticas en más sentidos de lo que creemos. Entre hogar y campo hay una gran distancia y quizá sería bueno que pasáramos más de nuestros días y noches sin que mediara obstáculo alguno entre nosotros y los cuerpos celestes”
- “Se puede inventar una casa aún más conveniente y lujosa que la que poseemos…¿Hemos de esforzarnos siempre por obtener más de estas cosas en lugar de contentarnos alguna vez con menos?”
- "Yo tenía tres pedazos de piedra caliza sobre el escritorio y con gusto me libré de ellos al ver, espantado, que era necesario quitarles el polvo cada mañana, cuando el mobiliario de mi mente no se había desprovisto aún del suyo. Preferiría sentarme al aire libre, porque en la hierba no se forma polvo, salvo donde el hombre ha desnudado al suelo de ella”
- “Hoy las naciones están poseídas de una ambición insana por perpetuar su recuerdo en la cantidad de piedra tallada que dejan. ¿Y si de tomaran igual trabajo en suavizar y pulir sus maneras?”
- “Fui a los bosques porque quería vivir con un propósito; para hacer frente sólo a los hechos esenciales de la vida, por ver si era capaz de aprender lo que aquélla tuviera por enseñar, y por no descubrir, cuando llegare mi hora, que no había siquiera vivido. No deseaba vivir lo que no es la vida, ¡es tan caro el vivir!, ni practicar la resignación, a menos que fuera absolutamente necesario. Quería vivir profundamente y extraer de ello toda la médula; de modo tan duro y espartano que eliminara todo lo espurio, haciendo limpieza drástica de lo marginal y reduciendo la vida a su mínima expresión”
Como he indicado, si valoramos algunas de estas frases en su contexto histórico y comprobamos su vigencia actual, es muy probable sentir profunda sorpresa. El último párrafo me parece memorable.
Que tengan buen día.